Perspectivas y desafíos futuros del teletrabajo
Por: María Riveros

Aunque desde el año 2008 Colombia dio paso a la normatividad que promueve y regula el teletrabajo, en el último año producto del confinamiento obligatorio generado por la pandemia, esta modalidad ha sido determinante para el sistema productivo del país, al tiempo que ha planteado desafíos importantes en materia de transformación digital y calidad de vida de las personas a las que les tocó enfrentarse de un momento a otro al mundo virtual.
Según cifras de los Ministerios del Trabajo y de las TIC, en Colombia cerca de 3 millones de personas desempeñan actualmente sus labores mediante el teletrabajo, de la estadística se desprenden diversas experiencias e historias de vida de hombres y mujeres que en las actuales circunstancias han tenido que adaptar y transformar sus espacios privados a los requierimientos de su trabajo.
¿Cuáles son los efectos positivos y negativos que ha tenido esta modalidad de trabajo en los empleados?

Para Edilma Cruz Rodríguez, técnica de auditoria médica, fue un proceso muy complicado acostumbrarse a tener la oficina en casa, pero al final se adaptó, según ella padeció algunas afectaciones físicas por permanecer más tiempo sentada trabajando, en tanto algunos jefes promueven el trabajo por más tiempo del debido, asumiendo que las personas al estar en la casa pueden tener total disponibilidad.
Edilma es consciente de las responsabilidades que implica cumplir sus labores en el tiempo estipulado para ello, al tiempo que reflexiona en torno a la importancia de tener acceso a los dispositivos y herramientas para cumplir sus labores y que se respeten sus horarios, como condiciones fundamentales para quienes trabajan bajo esta modalidad. El mayor beneficio para ella es estar cerca de su familia, y no tener que exponerse a riesgos laborales al tener que trasladarse a su oficina.

A propósito de lo señalado por Edilma Cruz, la firma colombiana Nord, en un estudio realizado a mediados del 2020, indicó que la jornada laboral aumentó, se asume que dicho aumento se debe a que las personas durante la pandemia han pasado mayor tiempo realizando sus labores frente a la pantalla.
Paola Morales, psicóloga y jefe de enfermería, también comparte que su rutina de trabajo se trasnformó completamente ya que pasó de tratar con pacientes de manera presencial a atenderlos únicamente por medios virtuales:
¿Qué generó el teletrabajo en la pandemia?

El médico Jesús Fajardo manifiesta que los problemas de salud más recurrentes que se han presentado durante el teletrabajo han estado asociados al dolor de cabeza, agotamiento visual, dolores de cuello, dolor de espalda, dolor en las manos, y dolor de las piernas a causa del sedentarismo prolongado al que se han expuesto las personas en esta modalidad, así mismo, destaca que estrés y la fatiga crónica han sido también padecimientos que han tenido quienes realizan su trabajo desde casa.
La principal recomendación que se se hace a las personas que han presentado los anteriores síntomas tienen que ver con la generación de pausas activas, y la práctica de actividad física regularmente; de igual forma el médico Fajardo asegura que los criterios que deben tenerse en cuenta para la regulación del teletrabajo deben estar asociados a aspectos socio demográficos de cada población y con el tipo de labores a desempeñar, al tiempo que destaca que las empresas suelen tener un conocimiento muy limitado sobre la verdadera responsabilidad derivada del teletrabajo, según él, aunque se intente educar sobre la salud en el trabajo, se queda muy corto ese nivel de preocupación por los trabajadores.
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Además de las afectaciones a la salud física y mental que en algunas circunstancias ha desencadenado el teletrabajo, el que esta modalidad haya llegado por sorpresa en cuestión de meses a instalarse en la vida de las personas, genera presiones en lo que corresponde al vínculo con situaciones familiares, personales y laborales que afectan la intimidad y/o privacidad de los hogares, en ese sentido sería importante que en países como Colombia se actualizara la normatividad aprobada en 2008 mediante la Ley 1221, teniendo las consideraciones que evidencian los cambios importantes que dicha modalidad ha producido en los últimos meses.
Como lo ratifica la abogada Sandra Ballón, la reglamentación del teletrabajo en las actuales circunstancias debe ser una prioridad del gobierno, ya que la pandemia ha generado cambios a nivel global que indiscutiblemente inciden en esta modalidad de trabajo.
También un aspecto que se debería tener en cuenta a la hora de reglamentar el teletrabajo de manera actual es que los empleados no han tenido ningún tipo de subsidio, en cuanto a que sus gastos de internet y servicios públicos han aumentado, su salario sigue siendo el mismo.
Es importante en tal sentido, que los trabajadores conozcan la responsabilidad que deberían asumir las empresas con la reglamentación del teletrabajo, y aunque se asegura por parte de algunas de dichas empresas el cuidado y la preocuación por la integridad de sus empleados, deben existir mayores referentes en cuanto al ámbito jurídico del teletrabajo.

Además de la perspectiva médica y jurídica, una mirada desde la sociología permite entrever el impacto que han tenido las personas en el desarrollo de sus labores en sus hogares, lo cual ha generado afectaciones en el desarrollo de las relaciones interpersonales.
Para el Doctor en Historia y Magister en Filosofía, Félix Raúl Martínez, quien ha desempeñado la mayoría de su docencia en el ámbito de las Ciencias Sociales y Humanas, y en los últimos años en el estudio de las transformaciones de la tecnología en la vida de las personas, el principal rasgo que tuvieron los empleados en el último año en la modalidad del teletrabajo ha sido la ruptura o separación del tiempo, ya que a causa de la pandemia el tiempo usado para el desarrollo de actividades laborales y de descanso se invirtieron, lo cual dificultó de gran manera que las empresas entiendan en qué momento el horario termina, en palabras del historiador Martínez es como un “negocio que nunca cierra”.
Para asumir los retos frente a esta modalidad que llegó para quedarse aún en las circunstancias complejas en las que ha ocurrido su desarrollo, es pertinente y urgente para países como Colombia actualizar su legislación, incluyendo las necesidades y condiciones que demanda la actual coyuntura, y hacer valer los derechos de los trabajadores en aquellas situaciones donde los empleadores no garanticen unos mínimos para el desarrollo de las tareas y actividades asignadas.
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